Rotundamente sí. Cada día cuando demos de comer a los peces, es recomendable comprobar que todos acuden a comer, se mueven de forma vivaz, nadan bien, tienen el cuerpo en perfecto estado y las aletas enteras.
En caso de detectar manchas en las escamas, aletas plegadas, desgarradas o rotas o si vemos que el pez boquea mucho como si le costara respirar, serán síntomas de que algo está pasando. En la mayoría de los casos, se tratará de infecciones bacterianas, punto blanco u hongos. El principal motivo de estas enfermedades es por la baja calidad del agua.
En todos los casos será recomendable realizar una analítica del agua del acuario o llevar una muestra a nuestra tienda especializada para detectar cualquier cambio en la calidad del agua.
Si puedes, haz unas fotos o un vídeo del pez que creas que está enfermo y acude a tu tienda de acuariofilia de confianza para que puedan identificar la clase de enfermedad que es y puedan aconsejarte el procedimiento o tratamiento a seguir.
Siempre es mejor coger cualquier enfermedad en sus inicios que si un pez lleva ya muchos días enfermo. Es por ello que siempre se recomienda observar a nuestro peces diariamente para detectar cualquier síntoma extraño.